Posiblemente el licor que bebían los nabateros aragoneses y los almadieros navarros era el anís casero, el aguardiente y el patxaran. Lo que si se puede asegurar es que el licor que pasaba por las gargantas de los nabateros catalanes (Raiers) era la ratafía.
La RATAFIA DE LOS RAIERS (Raiers =Nabateros catalanes) es un licor elaborado con la maceración de nueces tiernas y la destilación de 22 plantas aromáticas, raíces y especies, con una graduación alcohólica de 29% vol.
Hoy en día continúa la tradición de este licor, hecho durante siglos en las casas de labrador de la Cataluña interior, siguiendo antiguas recetas, guardadas con mucho celo, que se transmitían de generación en generación.
En la Pobla de Segur continua la fabricación de la ratafía gracias a la familia Portet (Angel Portet es el presidente de la Asociación internacional de Almadieros, Nabateros y Raiers)
Esta fábrica de licores fue fundada el 1884 y en ella se elaboraban dos tipos de ron, cinco de coñac o brandy y cuatro de anís. Además de una elaborada variedad de ratafías.
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